Tuvimos una experiencia genial con amigos. La vista desde la terraza me dejó sin palabras. Hicimos un par de paseos en bici y visitamos lugares increíbles. La atmósfera era super acogedora y el desayuno fue delicioso, con varias opciones para elegir.

La nevera hacía ruido en nuestra habitación, lo cual resultó un poco molesto.

Desayuno dulce muy recomendado.

A. Habitación cómoda
B. Desayuno delicioso
C. Vistas impresionantes

A. Nevera ruidosa

la habitación estaba bastante cómoda, pero evidentemente carece de colgadores. ¿acaso no esperaban que tuviese donde poner mi toalla mojada? además, no recibí ni un mísero detalle al llegar. estuvo a punto de ser una buena experiencia, pero no obsequiarme nada lo arruinó todo.

Habitación super cómoda con vista a las ruinas, perfecta para una cena romántica en la terraza. La pareja que lo gestiona es encantadora y hasta puedes pedir el desayuno a tu gusto.

Esa nevera ruidosa me hizo sentir como en un concierto improvisado.

cama extra grande y desayuno dulce imperdible

ubicación conveniente, oferta gastronómica deliciosa

ruido de la nevera

La nevera ruidosa no opaca las geniales vistas y el desayuno exquisito

camas comodas vistas preciosas

La ubicación, la limpieza, la atención del personal fue simplemente excepcional.

Tuvimos una estancia agradable con una cama grande y almohadas cómodas. La vista desde la terraza era impresionante, aunque me parecería útil tener algunos colgadores en la habitación, especialmente con el baño compartido. A pesar de esto, disfrutamos de la experiencia en general.

la habitación estaba super cómoda, con una cama gigante y unas almohadas brutales. la pareja que lo gestiona es lo más, siempre dispuestos a ayudar y la vista a las ruinas es una locura. usamos la cocina para preparar una cenita y comimos en la terraza, muy chill. el desayuno es a elegir, recomiendo el dulce 100%. todo tenía un ambiente acogedor y bien cuidado.

la nevera hacía ruido y la tele ni la usamos. a veces el aire acondicionado se pasaba un poco de frío.

Recomiendo para parejas que buscan comodidad

La habitación con cama extra grande era muy cómoda, las almohadas eran perfectas, eso fue un gran alivio después de un día explorando. Además, disfrutamos de hacer nuestra propia cena en la cocina y comer en la terraza, la vista era increíble, realmente mejoró nuestra experiencia.

No fue barato, pero por lo que ofrecían estaba aceptable.

Habitación moi cómoda con vistas impresionantes ás ruínas. A atención da parella que a xestiona é exquisita, sempre dispostos a axudar. O desayuno, con opcións doces, foi delicioso. A verdade, un lugar acolledor e perfecto para desconectar!